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Asunción de María

¿LA ASUNCIÓN DE MARÍA ESTÁ EN LA BIBLIA?

Hermanos, hoy vamos a hablar sobre el tema de la Asunción de María, ¿qué significa? ¿está en la Biblia? ¿desde cuando se cree en la Asunción de María?, bueno pongamonos manos a la obra y pasemos a la primera pregunta:

¿Qué significa la Asunción de María?

Según la tradición y la teología de la Iglesia Católica, la Asunción de la Virgen María es cuando el cuerpo y alma de María, la madre de Jesucristo, fueron glorificados y llevados al Cielo al término de su vida terrena.

Ojo, el término Asunción no debe ser confundido con el de Ascensión, la cual se refiere a Jesucristo, ya que Ascención significa que Jesús ascendió por sí mismo. La Asunción de María, en cambio, fue llevada a cabo por Dios.

Al declararse el dogma de la Asunción de María, no se estableció si la Virgen murió y resucitó enseguida, o si marchó directamente al cielo. Muchos teólogos piensan que la Virgen murió para asemejarse más a Jesús pero otros sostienen la Dormición de la Virgen, que se celebra en Oriente desde los primeros siglos.

¿Puede alguien llegar al cielo sin conocer la muerte?

Por supuesto, dice la Biblia en el Salmo 115, versículo 3

Nuestro Dios está en los cielos, todo cuanto le place lo realiza. (Sal 115,3)

Y lo reafirma Lucas en su Evangelio:

Porque ninguna cosa es imposible para Dios. (Lc 1,37)

Asunción del profeta Elías
 

En la Biblia hay dos casos en que personas, es decir, seres humanos son llevados al cielo sin conocer la muerte, el primero está en el Segundo Libro de los Reyes 2, 11:

Iban caminando mientras hablaban, cuando un carro de fuego con caballos de fuego se interpuso entre ellos; y Elías subió al cielo en el torbellino. (2Re 2, 11)

Elías fue llevado al cielo, porque Dios así lo quiso. El otro caso se mensiona en Hebreos 11,5:

Por la fe, Henoc fue trasladado, de modo que no vio la muerte y no se le halló, porque le trasladó Dios. Porque antes de contar su traslado, la Escritura da en su favor testimonio de haber agradado a Dios. (Heb 11,5)

Si la Biblia lo dice, entonces hay que creerlo, para Dios no es imposible llevar al cielo a seres humanos en cuerpo y alma sn conocer la muerte.

En Hebreos dice que Henoc fue llevado por su fe, de Elías no tenemos duda que era un hombre de fe, ahora bien, ¿María era una mujer de fe?

María, Mujer de fe

¿María era una mujer de fe? No hay ninguna duda ya que María fue escogida por Dios para ser la madre del Mesías, el ángel la saluda diciendo:

«Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.» (Lc 1,28)

“Llena-de-gracia” (“Kejaritoméne”). La expresión “Kejaritoméne”, usada como nombre propio, es un participio perfecto, el cual denota un estado pleno y permanente de gracia y de favor divino.

Dijo María: «He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.» (Lc 1,38)

María, la esclava o también podríamos decir la Sierva del Señor, evoca la figura del Siervo de Yahveh. Como él, ella quiere realizar en plenitud su llamamiento con una docilidad incondicional al querer de Dios. ¡Que se haga en ella lo que el Señor quiera! ¡Realmente una mujer de fe!

Hasta el momento podemos decir, que para Dios no hay imposibles, si él quiere puede lleva a alguien al cielo en cuerpo y alma sin pasar por la muerte, como lo hizo con Henoc y Elías, dos hombres de fe. También podemos decir que María, que fue escogida por Dios para la misión más importante después de la de Jesucristo de toda la historia de la salvación, también era una mujer de fe. Pero esto no prueba la Asunción de María.

María, El Arca de la Alianza

Bueno, antes diremos que el Apocalipsis es un libro escrito en el género literario llamado apocalíptico, género que se caracteriza por recurrir de manera abundante a las profecías, visiones y simbolismos.

Y es en este libro en el capítulo 11, vesículo 19 que leemos lo siguiente:

Y se abrió el Santuario de Dios en el cielo, y apareció el arca de su alianza en el Santuario, y se produjeron relámpagos, y fragor, y truenos, y temblor de tierra y fuerte granizada. (Ap 11,19)

Debemos notar que esta visión se sitúa en el cielo, no en la tierra, dentro del Santuario de Dios se encuentra el Arca de la Alianza. Ahora veamos que era el Arca de la Alianza del templo de Salomón en el Antiguo Testamento, la cual era figura de esta Nueva Arca de la Alianza en el Santuario de Dios en el cielo.

También la primera Alianza tenía sus ritos litúrgicos y su santuario terreno. Porque se preparó la parte anterior de la Tienda, donde se hallaban el candelabro y la mesa con los panes de la presencia, que se llama Santo. Detrás del segundo velo se hallaba la parte de la Tienda llamada Santo de los Santos, que contenía el altar de oro para el incienso, el arca de la Alianza - completamente cubierta de oro - y en ella, la urna de oro con el maná, la vara de Aarón que retoñó y las tablas de la Alianza. (Heb 9,1-4)

El Arca de la Antigua Alianza estaba "completamente cubierta de oro", señal de que era algo muy valioso, y contenia una "urna de oro con el maná" que erá imagen de Cristo, el verdadero pan del cielo:

Les dijo Jesús: «Yo soy el pan de la vida. El que venga a mí, no tendrá hambre, y el que crea en mí, no tendrá nunca sed. (Jn 6, 35)

El Arca contenía además, "la vara de Aarón que retoñó", que representa el poder de Dios, y que es imagen de Jesucristo que dijo:

Me ha sido dado todo poder en el cielo y en la tierra. (Mt 28,18)

Era una vara seca que retoñó, es decir revivió, imagen de Jesús que resucitó y "que ha de regir a todas las naciones con cetro de hierro" (Ap 12,5)

Por último, también el Arca contenía las tablas de la Ley, es decir, la Palabra de Dios escrita sobre piedra, que Dios mismo entregó a Moisés, que son imagen de Cristo, la Palabra de Dios hecha carne:

En el principio existía la Palabra y la Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios. (Jn 1,1)

Y la Palabra se hizo carne, y puso su Morada entre nosotros. (Jn 1,14)

Esta claro, el Arca de la Antigua Alianza contenía objetos sagrados que eran imagen de Jesucristo, por lo tanto aquella antigua Arca era imagen de María, Arca de la Nueva Alianza que llevó en su vientre al mismo Jesucristo, nuestro Señor.

María, la Mujer vestida de sol

Pero no perdamos de vista algo, ¿donde estaba el Arca en Ap 11,19? en el cielo, y ¿como fue que llego hasta allá?, continuemos la lectura del Apocalipsis en el siguiente versículo después de Ap 11,19, Cualquiera esperaría que todo el capitulo 12 hablara de esta Arca perdida, buscada y llorada por mas de 500 años, pero para sorpresa del lector después de este capitulo esta visión desaparece y en su lugar (el cielo) aparecer esta “mujer”.

Una gran señal apareció en el cielo: una Mujer, vestida del sol, con la luna bajo sus pies, y una corona de doce estrellas sobre su cabeza; está encinta, y grita con los dolores del parto y con el tormento de dar a luz. (Ap 12,1-2)

"Una gran señal" nos recuerda la profecía de Isaías 7,14 donde Dios da una señal, de la venida del Mesías:

Pues bien, el Señor mismo va a daros una señal: He aquí que una doncella está encinta y va a dar a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel. (Is 7,14)

En Isaías, ¿quien era la señal?... María, en el Apocalipsis, ¿quien era la señal?... también María.

"Una Mujer, vestida del sol" recordemos el arca cubierta de oro, ahora no esta cubierta de oro sino vestida de sol, el Arca se cubrió de oro por lo contenía, María resplandece por quien lleva dentro de su vientre, no brilla con luz propia, sino con la gloria de Dios.

"Con la luna bajo sus pies y una corona de doce estrellas sobre su cabeza", lo que nos indica que esa Mujer es reina, reina del cielo pues corona lo forman estrellas y se ecuentra sobre la luna, luego son doce, lo que hace referencia a los doce apóstoles y a las doce tribus de Israel, por lo tanto reina de los santos del Antiguo y del Nuevo Testamento.

"Está encinta, y grita con los dolores del parto y con el tormento de dar a luz", esta observación remite a María, la Madre de Jesús al pie de la cruz (cf. Jn 19, 25), donde participa, con el alma traspasada por la espada (cf. Lc 2, 35), en los dolores del parto de la comunidad de los discípulos.

Continuemos leyendo el Apocalipsis...

Y apareció otra señal en el cielo: un gran Dragón rojo, con siete cabezas y diez cuernos, y sobre sus cabezas siete diademas. Su cola arrastra la tercera parte de las estrellas del cielo y las precipitó sobre la tierra. El Dragón se detuvo delante de la Mujer que iba a dar a luz, para devorar a su Hijo en cuanto lo diera a luz. (Ap 12,3-4)

"Y apareció otra señal en el cielo: un gran Dragón rojo" ¿Quién será este personaje? nos lo dice en el versículo 9

Y fue arrojado el gran Dragón, la Serpiente antigua, el llamado Diablo y Satanás, el seductor del mundo entero; fue arrojado a la tierra y sus Ángeles fueron arrojados con él. (Ap 12,9)

Más claro ni el agua, es el Diablo y las estrellas arrastradas por su cola son los ángeles caídos que lo siguieron.

"El Dragón se detuvo delante de la Mujer que iba a dar a luz, para devorar a su Hijo en cuanto lo diera a luz" confirma las palabras de Dios pronunciadas al Tentador:

Enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu linaje y su linaje: él te pisará la cabeza mientras acechas tú su calcañar. (Gen 3, 15).

En este versículo el Señor pone enemistad entre la Mujer y la serpiente, frente a la mujer en guerra esta la serpiente vigilando...Frente a la mujer resplandeciente aparece la misma Serpiente del Génesis y en el mismo son de guerra. Y dice el Señor en el Génesis que el linaje de la Mujer o sea sus hijos tendrían poder PARA DERROTAR AL DEMONIO, ¿quienes son los hijos de la Mujer? pronto lo sabremos.

Sigamos con la lectura del capitulo 12 del Apocalipsis

La mujer dio a luz un Hijo varón, el que ha de regir a todas las naciones con cetro de hierro; y su hijo fue arrebatado hasta Dios y hasta su trono. Y la mujer huyó al desierto, donde tiene un lugar preparado por Dios para ser allí alimentada mil doscientos sesenta días. (Ap 12,5-6)

"La mujer dio a luz un Hijo varón", María dió a luz un Hijo varón: Jesucristo, "y su hijo fue arrebatado hasta Dios y hasta su trono" a los ojos del mundo parece que perdió Jesús y ganó el Diablo, pero Jesús resucitó y venció al maligno.

"Y la mujer huyó al desierto, donde tiene un lugar preparado por Dios". El desierto es un lugar privilegiado para encontrarse con Dios: la Iglesia. Y se alimenta de lo mismo que se alimenta la Iglesia, la Eucaristía, la Palabra de Dios y la oración. "Mil doscientos sesenta días", tres años y medio, la mitad de 7, por un tiempo limitado.

Entonces se entabló una batalla en el cielo: Miguel y sus Ángeles combatieron con el Dragón. También el Dragón y sus Ángeles combatieron, pero no prevalecieron y no hubo ya en el cielo lugar para ellos. Y fue arrojado el gran Dragón, la Serpiente antigua, el llamado Diablo y Satanás, el seductor del mundo entero; fue arrojado a la tierra y sus Ángeles fueron arrojados con él." (Ap 12,7-9)

Entonces se definen dos bandos el bien contra el mal, y explota la gran batalla, los ángeles de Dios luchan contra los demonios

Oí entonces una fuerte voz que decía en el cielo: Ahora ya ha llegado la salvación, el poder y el reinado de nuestro Dios y la potestad de su Cristo, porque ha sido arrojado el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba día y noche delante de nuestro Dios. Ellos lo vencieron gracias a la sangre del Cordero y a la palabra de testimonio que dieron, porque despreciaron su vida ante la muerte. Por eso, regocijaos, cielos y los que en ellos habitáis. ¡Ay de la tierra y del mar! porque el Diablo ha bajado donde vosotros con gran furor, sabiendo que le queda poco tiempo." (Ap 12, 10-12)

Los cristianos somos parte de esta batalla al ser el demonio expulsado a la tierra, de ahí las persecuciones del Imperio Romano, y las persecuciones de todo tipo que a lo largo de la historia hemos sufrido como Iglesia, tales como violencia, calumnias, herejías etc. ¡Animo que Cristo ya venció! En la Iglesia hubo y hay hombres y mujeres santos que vencieron el mal gracias a la Sangre de Cristo y al testimonio que dieron.

Cuando el Dragón vio que había sido arrojado a la tierra, persiguió a la Mujer que había dado a luz al Hijo varón. (Ap 12, 13)

El Dragón, es decir el Demonio, persigue a la Mujer. María a lo largo de la historia ha sido perseguida, calumniada, despreciada un sinumero de veces, es el Dragón, la antigua serpiente que la odia y la ataca.

Pero se le dieron a la Mujer las dos alas del águila grande para volar al desierto, a su lugar, lejos del Dragón, donde tiene que ser alimentada un tiempo y tiempos y medio tiempo. (Ap 12,14)

"Se le dieron a la Mujer las dos alas del águila grande para volar al desierto, a su lugar, lejos del Dragón". Este es el momento de la Asunción, la Mujer no tiene alas, se le dieron las alas del águila grande, es decir Dios la elevó a las alturas, las alas del águila grande indica que fue elevada a una altura que ningún otro puede llegar, al lugar que Dios le tiene reservado, donde el Dragón no la puede alcanzar. ¿Cuál será ese lugar? veamos una imagen del Antiguo Testamento que habla de la madre del Rey:

Se levantó el rey, fue a su encuentro (de su madre) y se postró ante ella, y se sentó después en su trono; pusieron un trono para la madre del rey y ella se sentó a su diestra. (1Re 2, 19)

En este relato el rey es imagen de Cristo, y la madre del rey es imagen de María, debemos notar que el rey se postra ante su madre en señal de respeto, no la adora solo le muestra respeto, y espués el rey se sienta en su trono, y la madre del rey en un trono, a su diestra. Este es el lugar que le tiene preparado a María, un trono a la diestra del Rey, porque es la Reina Madre.

Entonces el Dragón vomitó de sus fauces como un río de agua, detrás de la Mujer, para arrastrarla con su corriente. Pero la tierra vino en auxilio de la Mujer: abrió la tierra su boca y tragó el río vomitado de las fauces del Dragón. (Ap 12, 15-16)

Volvemos a recordar la eterna enemistad entre la antigua Serpiente y la Mujer, hace que el Dragón vomite sobre ella todas las pestilencias, infamias y calumnias que trae dentro, pero no logra tocarla. María es inmune a los ataques que se lanzan contra ella.

(El Dragón) Entonces despechado contra la Mujer, se fue a hacer la guerra al resto de sus hijos, los que guardan los mandamientos de Dios y mantienen el testimonio de Jesús.(Ap 12, 17)

Ahora, ante la imposibilidad de destruír primero al Hijo de la Mujer (Jesucristo), y luego a la Mujer (María), el Dragón se lanza contra los otros hijos de la Mujer, ¿quienes son esos, los otros hijos de María?: "los que guardan los mandamientos de Dios y mantienen el testimonio de Jesús" dice el versículo 17, es decir, nosotros. El Demonio se lanza contra la Iglesia, pero ¿en que consistirá este ataque?

Por dos mil años el enemigo ha hecho su mejor esfuerzo, aún así la Iglesia sobrevivió e incluso floreció durante cientos de años de terrible persecución del Imperio Romano, la Iglesia sobrevivió las invasiones bárbaras, sobrevivió ola tras ola de jihads, sobrevivió la Revolución Francesa, sobrevivió el nazismo y el comunismo, aqui en México sobrevivió la Reforma, la Revolución de 1910 y la Persecución religiosa y poniendo nuestra esperanza en Jesucristo y encomendándonos a María, la Iglesia sobrevivirá el odio de Hollywood, la malicia de los medios y la maldad embustera de la industria del aborto. Amén.